En esta época del año es cuando más días de lluvia se registran en nuestra zona geográfica. Es por eso que hoy queremos recordarte la importancia de determinados aspectos a la hora de realizar una conducción lo más segura segura posible mientras llueve.
Lo esencial es el estado de tu vehículo.
Recuerda que neumáticos, frenos, escobillas, amortiguadores y faros deben estar en un perfecto estado de salud. Si alguna de las piezas de tu vehículo no se encuentra en las condiciones óptimas puede resultar un potencial problema de seguridad.
Despacio, pero seguro.
Es importante que se reduzca la velocidad de la marcha y guardar una distancia de seguridad prudente porque las condiciones de visibilidad se reducen y, en caso de peligro, tenemos un espacio de margen para reaccionar. Conduce tranquilo y evita movimientos bruscos (cambios de dirección, frenazos…)
¿Llueve de día?
Da igual. Es importante que los faros se enciendan en cualquier momento del día si hay lluvia porque nos ayudará a ver y a ser vistos. Las luces cortas o de cruce serán suficientes.
Cristales limpios y sin vaho.
Si sabes con antelación que lloverá, te recomendamos tener cristales y lunas bien limpios para evitar que se enturbien. De igual forma es importante evitar el vaho. En este post te explicas cómo hacerlo.
Ojo con las líneas.
Evita circular sobre las líneas blancas del pavimento. La pintura hace que se pierda adherencia con la carretera y el coche nos puede patinar.
¿Otro consejo sobre líneas? Utiliza el trazado del coche de delante. Los neumáticos van secando la carretera a su paso, por lo que si seguimos su trazado estaremos pasando por una capa de agua más fina.
¿Y si hago aquaplaning?
Ante todo no pierdas la calma. Muchas veces pasa pasar sobre un charco o balsa de agua. Nuestro neumático no puede evacuarla, perdemos el contacto con la carretera y, por tanto, el control del coche. En estos casos es importante no frenar, reduce la velocidad y sujeta el volante con fuerza.
Ya sabes que nos preocupa tu seguridad y la de los tuyos. El mejor consejo de todos siempre será la prudencia.